Barandillas de cristal

Las barandillas de cristal marcan la diferencia en tu hogar. La amplitud que aportan y su minimalismo, hacen que sea uno de nuestros productos estrella. Este tipo de barandillas aportan un estilo elegante e innovador que hacen que sean perfectas para terrazas, jardines, escaleras interiores y especialmente para balcones.

El grosor de estos vidrios varía en función de las necesidades de la instalación, desde cristales de 4 mm de grosor a 10 mm. Son instalaciones que por lo general se realizan de forma rápida, sin embargo, en ocasiones sobre todo cuando se realizan instalaciones en escaleras, es necesario sacar plantillas que nos faciliten el corte del vidrio y su posterior instalación.

En Industrias Calvo realizamos instalaciones como:

Barandillas de cristal para balcones de viviendas

Esta instalación te facilitará tener una visión total desde el balcón. Además la presencia de un cristal seguridad te permitirá apoyarte en ella sin ningún problema. Pueden instalarse de múltiples formas, en función de la necesidad de la instalación. Algunas pueden disponer de pasamanos, y otras directamente el canto pulido del cristal puede cumplir su función.

Barandillas de cristal para fachadas de edificios

Las barandillas de cristal también se pueden instalar en las fachadas de los edificios. Este tipo de instalaciones suelen dar una imagen muy vanguardista del edificio. Son muchas las empresas que quieren dar una imagen de innovación y transparencia, y el cristal es un excelente complemento en este sentido.

Barandillas de cristal para escaleras

El cristal y las escaleras están diseñadas para convivir, la elegancia que aporta a una vivienda es máxima, además te permitirá tener mayor luminosidad, amplitud y confort.

La instalación de este producto tiene diferentes modalidades:

Cristal recibido desde la escalera

En esta modalidad no existe ningún tipo de herraje sobre el que se sostiene el cristal, simplemente el cristal se encuentra empotrado por una U de hierro que está recibida por albañilería, asegurando la inmovilidad del cristal. En este tipo de escaleras el cristal debe de ser más grueso puesto que necesitamos una mayor resistencia. El canto pulido que se aplica en los bordes del cristal nos permite utilizarlo como pasamanos evitando cortes.

Cristal recibido por botones

Esta modalidad está caracterizada por existir unos pequeños herrajes redondos denominados “botones” sobre los cuales se sustenta el cristal y otorgan la sensación de que el cristal está flotando. Es una escalera que al igual que la recibida por albañilería nos aporta el máximo minimalismo posible puesto que carece de cualquier herraje que pueda entorpecer la visión. En este caso el vidrio tiene que ser templado puesto que necesita una serie de agujeros sobre los cuales se engancharán posteriormente los botones.

Cristal recibido por tubos de acero inoxidable

En este caso encontramos que los cristales se mantienen sujetos por una serie de tubos generalmente de acero inoxidable, que da un resultado muy atractivo puesto que se puede observar perfectamente la composición de la escalera. Estos tubos de acero es fundamental que vayan recibidos en la escalera para evitar su posible movimiento, también pueden ir atornillados.

Barandillas de cristal para jardines

El jardín es uno de los lugares con mayores posibilidades de instalación de cristal, desde cerramientos hasta barandillas que te sirvan para delimitar una zona determinada. En Industrias Calvo queremos potenciar esta parte de tu hogar para que la disfrutes al máximo.

Barandillas con pinzas

Estilo 100% minimalista, las pinzas son de acero inoxidable y pueden ser mate o brillo, tienen capacidad para aguantar un vidrio de más de 200 kg. Su simpleza permiten dar una sensación de máxima transparencia y limpieza a su terraza.

Barandillas de hierro

Este tipo de barandillas son ideales para la separación de distintas zonas en tu jardín. Son barandillas que además pueden estar lacadas en el color que el cliente desee, de tal forma que su adaptación al jardín es perfecta. Barandilla donde los cristales están sujetos por junquillos que evitaran una posible caída.